20 marzo 2012

Escalando con Vlady - Via Chelo

 
Vlady dándose la parte "tiesa" del primer largo

Al final, después de casi siete años de conocernos virtualmente (y bueno, alguna quedada física en la San Silvestre, todo hay que decirlo) quedamos Vlady y yo para escalar la via Chelo, a la derecha de cinco cestos, en la Cañada Real.

 
El croquis que se ha currado Vlady

Quién no sepa quien es Vlady diré que es el autor del  blog Historias de Montaña y autor del libro "El Criado de los Dioses", que aunque todavía no me lo he leido, es muy recomendable. Vlady es un titán y ya se ha currado el post, asi que lo enlazo :D

El Capitán Penurias pasando penurias en el mismo tramo

La vía en el croquis no parece muy díficil, IV+ de canalizo para empezar y IV+ de fisura para seguir, pero claro, eso es solo en el croquis. Nada más llegar allí, vemos que la entrada parece un jardín, no solo por los matojos, sino porque está perfectamente regado (la vía realmente es una bajada de agua). Vlady me dice que me apriete yo el primer largo, pero lo veo raro y le digo que tire. De todos modos mi brazo izquierdo no es que esté muy fino, así que bueno, de eso que me libro, porque aunque la entrada es muy fácil (debe de andar por el III) cuando la cosa se pone tiesa Vlady tiene que apretar, y además se queda sin piezas para proteger (pone el 5 nada mas empezar y arrastra el 4 por la fisura, porque es bastante grande). El tío es mas que elegante, y se aprieta el largo sin quejarse.  Subo de segundo y lo paso apretado. Vamos, que subo aleteando como una foca, porque la fisura no es ni muy estrecha ni muy ancha, y eso pasa factura. Pero vamos, llego al a reunión.

Asi parece que el canalizo es fácil y todo

El segundo largo sale a la derecha de la reunión, y sigue por el canalizo. Vlady sale otra vez de primero y comienza el largo con un paso de equilibrio algo tontorrón que hace que se tenga que estirar bastante para pasar. Nada mas subir, ve que el canalizo se ensancha y que no tiene piezas para proteger. Sin mucho problema, se da el offwidth e incluso baja de nuevo para chapar una reu a derechas que no había visto. Sin mucho problema, llega a la reunión y me recupera. Si en el primer largo aleteé, en el segundo me arrastro como un gusarapo malo hasta llegar a la reunión: lo de los canalizos es para recios de verdad.

 
Vlady en el paso "chungo"

Desde la reunión, dos rápeles nos dejan en el suelo. Eso si, el frio que hemos pasado en la vía ha sido bastante mítico: con todo puesto hemos pasado bastante frio, es que la Pedriza es así. Sin entretenernos mucho, recogemos y bajamos a casa Julián para tomarnos la clásica junto con un bocata de tortilla que quita el sentido. Está claro que habrá que repetir, y la próxima tiene nombre: la chocolate en la cabrera, aunque esa será otro post (y haré algún largo de primero).


Un gran escalador (el de azul) y un mangurrián :-)

3 comentarios:

Historias de montaña dijo...

Un placer Juan...muchas así o por lo menos parecidas ;)

Salu2

Capitán Penurias dijo...

El placer es mio, tontín !
Veras como nos apretamos unas
cuantas mas :D

Vlady dijo...

A ver si es verdad ;)